¿Por qué debe importarte tu marca personal? | INCAE
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¿Por qué debe importarte tu marca personal?

17 de Julio 2018
Rocío Pastor

Hay quienes se preocupan de su marca personal cuando sienten que su carrera se ha estancado y otras que lo hacen cuando se percatan de que no están siendo tomadas en cuenta para posiciones y proyectos clave en sus organizaciones. Hay también profesionales que se ocupan del tema hasta que pierden su empleo así como emprendedoras que empiezan a dedicarle esfuerzos cuando la fuerza de su negocio ha decaído.

¡No seas una de ellas!

Tener una marca personal distintiva poderosa es algo que debe importarte y es algo en lo que deberías trabajar proactivamente con independencia de tu edad, tu puesto, tu profesión y la madurez, o incluso el éxito actual, de tu carrera o negocio.

Si no lo estás haciendo, no esperes más, pues una buena gestión de tu marca personal puede impulsar tu carrera, mejorar tu empleabilidad, tangibilizar tus resultados y potenciar tus oportunidades.

En un mundo cada vez más competitivo y desafiante, las mujeres debemos administrar nuestra marca personal de la misma manera en que las grandes compañías gestionan sus marcas: Deliberadamente. Consistentemente. Sistemáticamente.

Si empiezas a hacerlo cuando estés urgida, o no te quede más remedio, no te sorprendas de que el resultado te decepcione pues, paradójicamente, la marca personal tiene que ver más con lo que uno hace por otros, que con lo que los demás hacen por uno. Suena a trabalenguas, pero es así.

La marca personal es la síntesis de las percepciones, imágenes y expectativas que activas en las personas cuando te ven, oyen tu nombre, te recuerdan o se refieren a ti cuando están con otros. Por ello, marca personal es tanto promesa como cumplimiento.

No se puede activar una marca personal memorable, si antes no has dejado una huella positiva en las personas con las que te relacionas en distintos ámbitos, tanto a nivel personal como profesional.

Piénsalo por un momento. ¿Qué crees que dicen otras personas sobre ti cuando no estás allí?; ¿Qué adjetivos crees que utilizan para describirte?; ¿Son atributos con los que te identificas, te provocan orgullo y -más importante aún- te diferencian positivamente de tu colegas?. O, dicho de otra manera: ¿constituyen una carta de presentación que te abriría puertas o… te las cerraría?.

La mejor llave para una marca personal poderosa es ser nuestra mejor versión con todos y en todo momento, generando valor con nuestras acciones, con nuestras actitudes, con nuestros resultados. Además, hay que saber tangibilizarlo. Esto último es algo que, a las mujeres, por diferentes razones, nos cuesta más hacer.

Ser tu mejor versión es un capital que te sirve hoy y que te impulsará mañana. Por eso, vale la pena que al finalizar cada día te preguntes:

  • ¿Generé valor a otros hoy con mis entregables, con mis acciones, con mis palabras?
  • ¿Di lo mejor de mí en las reuniones, en mis presentaciones e interacciones?.
  • ¿Honré hoy mis compromisos?, ¿Cumplí lo que ofrecí?.
  • ¿Me preocupé, de forma genuina, por otras personas? ¿Hice lo que estaba en mis manos por apoyarlas?
  • ¿Actúe, a lo largo del día, de la manera en que quiero me perciban o me recuerden los demás?.
  • O de manera más contundente: ¿Fui hoy, sin lugar a dudas, mi mejor versión?. ¿Hice mi mejor esfuerzo para conseguirlo?.

Al responder una o varias de estas preguntas cada día, harás una gestión más consciente de tu marca personal y tendrás más presente su impacto: en ti y en las personas con las que relacionas. De tu coherencia, depende la fuerza de tu marca personal. De tu intención, para con otros, depende que tan perdurable sea. Así que: remarca tu marca. Hazlo conscientemente, deliberadamente, sistemáticamente. Y sobre todo: hazlo generando valor a los demás.

Este artículo se publicó originalmente en la Red PROLID-BID. 

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