(Discurso completo ofrecido por Enrique Bolaños, Rector de INCAE Business School durante la Ceremonia de Graduación del Executive MBA 2018-I).
Quisiera iniciar por darles una calurosa bienvenida a nuestro Campus Walter Kissling Gam. Es para mi un honor estar aquí hoy ante la clase del EMBA 2018-I quienes, tras meses de dedicación, compromiso y sacrificios, han concluido exitosamente su Executive MBA de INCAE. Esta clase que consiste de 50 graduandos, entre ellos 13 mujeres y de 10 nacionalidades. Además, ya esta clase ha consolidado en estos últimos meses dos compromisos, una boda y tres lindos bebés.
Aprovecho a felicitar a cada uno de sus familiares y amigos quienes han venido acompañándolos durante este proceso, apoyándolos en cada paso del camino, y hoy están aquí presentes aún cuando tuvimos que cambiar la ubicación de esta graduación en última instancia ante los acontecimientos que se han desarrollado en Nicaragua en las últimas semanas.
Estoy seguro que esta Maestría los ha marcado de una manera única a cada uno y los ha cambiado para convertirse en mejores profesionales, pero a la vez les pido que por favor no pierdan de vista que las realidades de nuestras sociedades en muchas instancias se han mantenido igual. Es por ello que quisiera tomarme este tiempo para reflexionar sobre algunos puntos que en mi opinión son cruciales para que cada uno de ustedes puedan incidir en el desarrollo de sus países, un objetivo que sin duda está cerca del corazón de muchos presentes hoy.
Las estadísticas claramente demuestran que los países mas democráticos, es decir los países que respetan la institucionalidad, los que tienen estado de derecho, los que tienen independencia de los poderes del estado, los que tienen reglas del juego clara, los que tienen un sistema judicial creíble son los países menos corruptos, son los países de mejor nivel de educación y los de mayor ingreso por habitante y por ende los países de mayor progreso social para sus ciudadanos.
El Informe Global de Competitividad del Foro Económico Mundial, del cual INCAE es socio, prepara anualmente un estudio comparativo entre cerca de 140 países combinando datos duros y de percepción que aborda temas desde los requerimientos básicos de las sociedades (salud, infraestructura, y educación básica), hasta la eficiencia y la innovación.
No debe ser sorpresa la lista de los mejores países. El que fue líder mundial en el índice del último estudio realizado en el año 2017 fue Suiza y Estados Unidos quedó en segundo lugar. En América Latina los países que lideraron la región fueron Chile (en el puesto 33) y Costa Rica (en el puesto 47). En el otro extremo El Salvador y Venezuela fueron dos de los tres peores países.
Y si vemos el Informe del índice de corrupción preparado por Transparencia Internacional reporta resultados muy similares. Los países latinoamericanos con el índice mas bajo de corrupción son Uruguay, Chile y Costa Rica. Los de índice mas alto son Guatemala, Nicaragua y el peor Venezuela.
Es decir, todos debemos tener claro que democracia, y el imperio de la ley son factores fundamentales para el desarrollo de una sociedad y el bienestar de sus ciudadanos.
Así como es claro que un MBA de INCAE es fundamental para que seamos profesionales mas exitosos debe ser claro que la democracia y el imperio de la ley son fundamentales para una mejor sociedad.
Así que ahora quiero preguntarles, ¿Cómo construimos la región y mas específicamente el país que queremos entregar a las siguientes generaciones? Cómo nos aseguramos que nuestros países sean viables para nuestros hijos y nuestros nietos? Primero les pido que estén conscientes que haciendo más de lo mismo no nos llevará al lugar deseado.
Quisiera enfocarme de manera concreta en dos puntos:
1. EN PRIMER LUGAR HABLEMOS DE DEMOCRACIA Y DE INSTITUCIONALIDAD.
La institucionalidad es vital para el desarrollo de un país y corta transversalmente todas las esferas de la vida política, empresarial y social.
Ya vimos que los países mas democráticos son a la vez los menos corruptos, los de mayor progreso por habitante y los de mejor nivel de educación.
La institucionalidad en Latinoamérica se ha deteriorado, con democracias fallidas y escándalos de corrupción a lo largo de la región.
Tenemos el caso de la constructora brasileña Odebrecht que involucró a funcionarios de gobierno de muchos de nuestros países, para obtener beneficios en contrataciones públicas, este es la definición de texto de corrupción y falta de ética en el trabajo. Ya este caso le costó el puesto al presidente de Perú.
También en la actualidad tenemos al ex presidente de Brazil en la cárcel, al ex presidente de Panamá en la cárcel al ex presidente de Guatemala en la cárcel y al ex presidente de El Salvador en Nicaragua evitando pasar por la justicia de su país
También tenemos el caso de Honduras cuando el reciente proceso electoral provocó semanas tensas y violentas manifestaciones y confrontaciones que terminaron en varias muertes.
Asimismo, tenemos la situación de protestas sociales en Nicaragua, que desafortunadamente han terminado en violencia y ya ha causado la innecesaria y trágica pérdida de más de 50 vidas. El gobierno actual está siendo fuertemente cuestionado. Este gobierno que hasta hace poco era clasificado como estable, con alianzas con el sector productivo, con estabilidad macroeconómica y con cierto nivel de crecimiento económico.
Lo que la historia claramente reconoce es que el modelo de gobierno en donde exista institucionalidad y democracia, en donde se penalice la corrupción, es aquel modelo donde se logra un verdadero progreso social para nuestros ciudadanos. Solo así nuestros países podrán ofrecer la seguridad, respeto y ética que sus ciudadanos merecen y luego podrán ser considerados viables para inversiones tanto nacionales como extranjeras que generen empleos dignos e inyecten capital a nuestras economías.
2. EN SEGUNDO LUGAR HABLEMOS DE EDUCACIÓN
La única arma que debemos usar en nuestras naciones es la educación ya que como bien mencionó Nelson Mandela, “es la más potente para cambiar el mundo”. Debemos instar el desarrollo del capital humano a partir del mejoramiento la educación, desde la básica hasta la superior.
Cuando un país carece de educación no podrá siquiera pasar a la fase de eficiencia y mucho menos de innovación. Esto únicamente irá abriendo la brecha entre la minoría con riquezas y la vasta población en niveles altos de pobreza extrema.
Las necesidades en educación son complejas e incluyen la preparación para un mundo que cambia drásticamente y que nos cuesta entender. Pero cada uno sentado aquí puede cambiar la realidad nuestras sociedades, aunque sea de una persona en una persona.
En fin, debemos incidir en estos dos puntos de manera transversal, para ayudar a que nuestras sociedades cuya pobreza, corrupción, inseguridad y burocracia aún gobiernan, den el primer paso hacia la prosperidad. No vendrá alguien en el futuro a instar estos cambios, ya que son ustedes el futuro y espero sean la voz del cambio. Recordemos lo que dijo Jorge Santayana, filósofo español, profesor de Harvard: Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo
Así que les vuelvo a formular la pregunta: ¿Cómo construimos la región y mas específicamente el país que queremos entregar a las siguientes generaciones?
En países desarrollados con democracias sólidas y con instituciones y entes reguladores creíbles el rol del empresario puede ser limitado exclusivamente el lograr máximo desarrollo de su rentabilidad.
Pero en países como los nuestros el sector privado tiene una responsabilidad mucho mayor que la de su rentabilidad.
Una sociedad moderna no puede funcionar sin políticos. La ausencia de políticos termina en anarquía, y la ausencia de buenos políticos termina en autocracia, y en sociedades fallidas.
En todos los países latinoamericanos el sector privado tiene la responsabilidad de velar por la institucionalidad. De velar para que tengamos buenos políticos para lograr un desarrollo sostenible e incluyente a largo plazo mediante la inversión en la educación, en la construcción de instituciones fuertes, en busca de un camino de progreso económico y bienestar para todos los ciudadanos. Esto es hacer política correctamente.
Solo así podremos iniciar a romper los ciclos de nuestros países, con profesionales que fomenten los ingresos a través de sus negocios, pero respetando el concepto de sostenibilidad a través del respeto de nuestros recursos naturales, fomentando la inclusión social, y promoviendo la institucionalidad ya que como bien sabemos, NO PUEDE HABER EMPRESAS EXITOSAS EN SOCIEDADES FALLIDAS.
Pareciera que poder balancear todo esto: el trabajo, la familia, sus propósitos y su aporte a sus sociedades, fuese casi imposible. Aunque muchas veces no es fácil, es posible si todos aportamos a la misma misión del progreso y desarrollo sostenible de nuestros países. Y si cuentan con algo en INCAE, es con una comunidad de graduados que comparten sus ideales y urgencia de generar cambio.
Saquen provecho de todo lo que adquirieron como estudiantes para ustedes, sus familias, sus comunidades y sus países. Y sin duda este título será la mejor inversión de sus vidas.
¡Muchas felicidades nuevamente y éxitos!
