Como emprendedores es fácil enamorarnos de nuestro producto, trabajar ciegamente para perfeccionarlo y lanzarlo a un mercado que, estamos seguros, lo recibirá con los brazos abiertos. Pero trabajar duro y tener una mente positiva no son suficientes para garantizar que el producto tendrá aceptación. ¡Debemos ser realistas!
Un primer paso hacia la sensatez es entender a nuestros potenciales clientes. Para lograrlo, nos puede ser útil el modelo de desarrollo de clientes creado por Steve Blank, un emprendedor y profesor de Silicon Valley.